Como plantar marihuana en tu propia casa, sin que nadie te diga nada y para tu propio consumo. Una práctica que cada vez llevamos más y más gente a cabo, que no hacemos mal a nadie, y que a parte de ahorrarnos dinero sabremos lo que fumamos. No es lo mismo una hierba cultivada con cualquier cosa y a lo grande, que tus plantitas cuidadas por ti en tu balcón o dentro de tu armario de cultivo.
Muchas veces ignoramos lo que fumamos, pero hay mucha gente que cultiva comercialmente que les da igual el producto final con tal de que pese. Usan abonos químicos, pesticidas, insecticidas con cientos de químicos…y luego no limpian las plantas, al igual que muchas veces la venden con hongos como oidio, que prácticamente no se nota una vez seca si no lo miras con un microscopio, o botrytis que es esa pelusilla que les sale a los cogollos por dentro.
Si plantas marihuana en casa, sabrás de que manera está cultivada, las plagas que a tenido y como se han tratado, tendrás la oportunidad de limpiarla de fertilizantes antes de cortarla y sabrás si has tenido hongos o no, y si los has tratado para que no haya restos cuando coseches.
Ahora os explicaremos paso a paso como plantar marihuana, para que puedas ponerte una macetita o varias en tu balcón o terraza, o en su caso dentro de un armario de cultivo.
Plantar marihuana paso a paso;
Lo primero que debemos hacer es elegir una variedad, elige una que te guste de sabor, ya que será lo que tienes que fumar tú. Elige una que se adapte a tu zona de cultivo, ya que unas acaban antes que otras. Busca Sativa o Indica, unas hacen unos efectos y otras otro… Una vez elegidas y en tus manos deberemos germinarlas.
Para germinar tus semillas, lo tendrás relativamente fácil. Necesitamos un Tupper, servilletas de papel y agua a parte de las semillas, claro está. Ponemos un par de servilletas en el fondo del Tupper y echamos un poco de agua en la servilleta, mi técnica es echar unas gotas de agua y donde empapa la servilleta ya no echo más agua. Cuando lo tengamos ya húmedo ponemos nuestras semillas encima de las servilletas y ponemos otras dos encima, como si las arroparas. Humedecemos el papel de arriba igual que el de abajo, echando unas gotas y donde se moje ya no echamos más agua. Luego palpamos un poco para que las semillas se queden bien en contacto con las servilletas y cerramos el tupper. Si hace buen tiempo y calorcito basta con meter el Tupper en un cajón, si es invierno o hace frío lo mejor es que coloques tu tupper encima de un módem o de un TDT para que no esté frío, sino no germinarán.
Cada 24 horas miraremos nuestro Tupper a ver cuantas han germinado, las que les haya salido rabito de raíz ya se pueden pasar a tierra, las que sigan cerradas las dejamos en el Tupper hasta el día siguiente. A veces tardan hasta 15 días en abrirse, ten paciencia y no las plantes si no tienen raíz.
Si ya tienen raíz, deberemos llenar unas macetas de tierra y regarlas antes de meter las semillas. Hay que regarlas bien pero sin pasarse, si ves que pesa mucho hay que vaciarlas y llenarlas de tierra nueva, ya que pueden podrirse las semillas. Si la dejamos muy seca también corremos peligro de que se nos seque antes de que la semilla asome a la vida, y tendremos que regar la maceta con el peligro de que la semilla se mueva y o flote y se nos seque en la superficie sin que nos demos cuenta o que se nos de la vuelta y o tarde en salir o se muera ahogada en la maceta.
Una vez regada la maceta (recomendamos 7x7x9) deberemos meter nuestra semilla en la tierra. Haremos un agujerito con la ayuda de un boli, y metemos la semilla con la raíz que le a salido hacia abajo, más o menos lo que son 3 semillas de profundidad y la tapamos un poco por encima con tierra de la parte de arriba, sin prensar mucho.
Al cabo de un par de días veremos como nuestra planta brota a la superficie y poco a poco empezará a formarse. En unos días, cuando la maceta de 7x7x9 se te seque en 24 horas, ya tendrá raíces suficientes para ser trasplantada a una maceta mayor. Recomendamos 3L para el crecimiento. Si la cultivamos en interior la deberemos crecer a 18 horas de luz y 6 apagadas durante unos 20 días, después cambiaremos a 12 horas de luz 12 apagadas para que florezcan y trasplantamos a 7L donde estará hasta el final de la cosecha.
Si es en exterior deberemos ir trasplantando cuando veamos que se frena en la fase de crecimiento, y cuando cambie de estación de primavera a verano, hacer un último trasplante a una maceta el doble de la que esté. Por ejemplo, la ponemos en 3L en Abril, en mayo por ejemplo ves que se frena el crecimiento, trasplantamos a 7L. En Junio pega otro frenazo, la metemos a 11L o 18L. Y cuando llegue finales de Julio a una de 30L sería suficientísimo hasta el final de la cosecha.
Cada fase de la planta, necesitará comer ciertos nutrientes, en crecimiento lo que más absorbe es Nitrógeno, y en floración Fósforo y Potasio. Con lo cual, cuando la metamos en 3L ya estará preparada para los abonos, por que tendrá unos 10 días o 12 de vida, antes no hay que usar. Cuando cambiemos las horas de luz o empiece el verano, es cuando deberemos cambiar de fertilizante del de crecimiento al de floración. Cuando lleva la mitad de la floración deberemos aportar algo que tenga fósforo y potasio en dosis altas para que nos de una producción abundante de cogollos pesados.
Cuando veamos que nuestras plantas ya no beben agua apenas, la afloración de pelitos blancos merma y los marroncitos más oxidados se caen llega el momento de la cosecha. Deberemos aguantarla de 7 a 15 días con agua sola, hasta que la planta amarillee un poco y pierda muchos de los nutrientes que hay acumulados en su interior, para dejarnos un sabor más limpio a la hora de fumar. Cuando la tengamos así dos semanas, dejar que la tierra se seque bien y ya podremos cortarla. Es importante esperarse hasta el final, ya que si no cuando la ponemos a secar el cogollo que parecía gordito y duro acaba mermando tanto que parece de una rama baja, así estará duro y denso, ya que al final de la floración es cuando más endurece y engorda el cogollo.
Una vez cortada, la debemos o pelar o secarla con hojas. Si tenemos un ambiente seco y más o menos caluroso habrá que dejarla con las hojas para que no se nos seque demasiado rápido y pierda mucha calidad, y si tenemos un ambiente más húmedo es mejor despojarla de hojas antes de ponerla a secar, para que no le cueste tanto y se seque antes. El proceso debe durar unos 15 o 20 días en secarse.
Cuando ya esté seca y casi crujiente hay que meterla en botes herméticos de cristal, para dejar que se quede crujiente muy poco a poco. Es el proceso de curación, donde la clorofila se pudre al quedar algo de humedad pero no llega a podrirse el cogollo por que no hay tanta humedad. El cogollo cogerá un color marroncito potente que es el color que tiene la hierba de calidad.
Y con ésta serie de pautas tenemos que haber conseguido un cultivo de marihuana de buena calidad, en excelentes condiciones y no tendrás que recurrir a nadie para tener la mejor hierba para tu propio disfrute.