La lucha biológica contra los hongos es posible gracias a productos que afectan a las condiciones de desarollo de los agentes patógenos cuales oídio, roya, mildiu, negrilla, moho gris…
El oídio, por ejemplo, es un hongo blanquecino que afecta a varias especies de plantas. Las condiciones optimas para el desarrollo del oídio es una humedad ambiental entre el 50% y el 70%, falta de aireación, y temperatura entre 20º y 25º, con 15º puede empezar ya a manifestarse y hasta los 30º, temperatura en la cual se queda bloqueado, a los 35º es cuando empieza a resentir y a los 40º es cuando se muere el oídio. Estas temperaturas tienen que ser constantes por almeno 6 horas consecutivas, a los 35º con que pase 1 hora será suficiente matar el oídio y con 40º en 15 minutos está solucionado. En la zona de la península ibérica, desde Marzo hasta noviembre hay posibilidades de aparición de oídio.
Se manifiesta como una ceniza blanca, suele aparecer en plantas que pueden haber tenido algún tipo de estrés fisiológico, sobre todo falta de silicio, el silicio engorda las paredes celulares dificultando el acceso de hongos en la hoja. Este micelio se «esconde» en plantas que han estado enfermas precedentemente en sus yemas, y en las plantas cercanas a la afectada.
Hay varias técnicas para poder controlar o quitar el oídio, en la lucha biológica en contra a los hongos existe la canela, el tomillo, el bicarbonato, el propoleo, azufre, cola de caballo y técnicas de podas juntas a los elementos naturales cuales vientos y sol. El azufre es el producto mas usado aunque no todo el que lo utilice sabe que a temperaturas inferiores a 15º no actúa y con temperaturas superiores a los 30º puede ser foto-toxico, comunemente se dice que «se quema» la hoja.
A diferencia de la canela, que se puede usar casi sin limitaciones, no deja rastro y, gracias su gran cantidad de fenoles, actúa como fungicida y bactericida, también actúa como repelente para alguna plaga cual pulgón, también tiene propriedades desecantes. Funciona también con otros hongos, no solo el oídio, también el mildiu. Se usa tanto en polvo como en infusión, pulverizado.
El tomillo, con su gran cantidad de taninos, flavonoides y fenoles tiene propriedades antifungicas, no tiene plazo de seguridad, igual que la canela, si tiene aceites esenciales y terpenos que pueden dejar rastro en el sabor si no se espera 2 semanas por lo menos, se usa tanto el extracto como la infusión pulverizada.
El bicarbonato sube así tanto el ph que para el oídio puede ser fatal, con un ph tan extremadamente elevado, hasta 14, quema literalmente el oídio dejando manchas amarillentas, se mezcla con agua hasta que casi no se desuelva mas y se pulveriza, el primer efecto que notaremos, será que todo pistilo que viene a contacto con esta solución, se quema y se vuelve marrón aunque no haya llegado a su maturación.
El propóleo pulverizado tiene propriedades antifungicas, anti-bacterianas y antisépticas, no todos los propóleos valen para esta finalidad, por ejemplo, el propolis abedul tiene un 65% de flavonoides con elevado poder antifungico.
La cola de caballo se usa tanto como preventivo, y a veces como cura también, aunque se encuentra mas beneficio en usarlo como preventivo, es muy rico en silicio, elemento que engorda las paredes celulares aumentando las defensas de la planta contra a los hongos, también sube el ph del suelo. Se puede usar tanto en riego como pulverizado.
Lo ultimo que se puede hacer, pero no por eficacia, es usar técnicas de podas, hay que rebajar la masa foliar, permitiendo mas aireación de la planta, y ponerla al sol, sobretodo cuando son días que pasan los 30º de calor, hay que cortar todas las partes afectadas y, en absoluto no pulverizar agua ni soluciones nutritivas, en este caso, cambiaremos a ferti-irrigacion, y eventualmente podremos pulverizar una de las soluciones describidas anteriormente.
Estos remedios pueden funcionar no solo para el oídio, si no que también para otros hongos, hay buenos resultados también con la leche, parece que una leche diluida al 10% pueda dar mejores resultados que el azufre, hay quien usa también suero de leche, este resultado es debido a la cantidad de aminoácidos y sales cuales fósforo y potasio así tendremos un doble efecto sobre la planta, tanto de fungicida cuanto de estimulante.
Parece que hay también otras plantas que pueden ayudarnos en la lucha contra los hongos por ejemplo la albahaca, el perifollo, que a parte ser útil contra el mildiu, también es efectivo contra alguna plaga. Con todas estas alternativas, será suficiente dar una ojeada a lo que tenemos cerca de nosotros y seguramente encontraremos alguna de estas soluciones a portada de mano, hay que recordarse que al ser productos naturales, no tienen la misma velocidad en la efectividad, si con el químico en 1 o 2 aplicaciones muchas veces son suficientes, con los naturales tendremos que insistir un poco mas.
Autor: Fabio Inga